Cuando denuncio al ladrón y al canalla sólo al canalla y al ladrón señalo

Cuando llamo ladrón al ladrón y canalla al canalla, sólo al ladrón y al canalla aludo. Ladrones y canallas suelen cobijarse bajo la pudibundez moral, la insulsa descalificación y las leyes dictadas ex profeso para acallar la voz tronante que los desnuda como canallas y ladrones. Nada me produce más satisfacción que contemplar los cadáveres insepultos de ladrones y canallas, aullando sus pútridas carnes las huellas de mi látigo, deambular ululantes en los muladares buscando un rincón para cavar sus tumbas con la sordidez de su moral deshilachada. ¡Silencio ladrones y canallas que, aunque los tiempos parecen favorecer a canallas y ladrones, este espacio es un reducto de la decencia y de la integridad!

28 de febrero de 2010

MEMORABLES

1 de Marzo: 100 años del Himno del estado Bolívar
Santos: Rosendo, Albino, Adriano, Eudoxia, León, Antonina.
Reflexión para hoy: Cuando el individuo decide corromperse debe estar consciente de que no existe prótesis para la dignidad.
1444: Nace Alejandro Botticelli, pintor italiano.1493: La carabela "La Pinta" arriba al puerto de Bayona (Pontevedra), primer lugar de Europa en el que se supo la noticia del descubrimiento de América.1678: Se funda San Carlos de Austria, hoy solamente San Carlos, capital del Estado Cojedes.
1808: Napoleón Bonaparte crea la llamada "nobleza imperial", formada por generales del Ejército. Lo cambió todo para que todo siguiera igual. 1810: Nace Federico Chopin, compositor polaco.
1813: En proclama a los soldados del Ejército de Cartagena y de la Unión, con los que invade Venezuela, Bolívar utiliza por primera vez como adjetivo el derivado de Colombia que se haría gentilicio: “...Vosotros fieles republicanos marcharéis a redimir la cuna de la independencia colombiana como las cruzadas libertaron a Jerusalén, cuna del cristianismo”. En el desarrollo de la "Campaña Admirable", Bolívar toma San Antonio del Táchira.
1830: Bolívar renuncia a la Presidencia de la Gran Colombia y la entrega al General Domingo Caicedo.
1847: Asume la presidencia de la República el general José Tadeo Monagas.
1852: Nace en España, el Premio Nobel de Medicina Santiago Ramón y Cajal.
1858: Julián Castro ocupa la Presidencia de Venezuela.1879: Bolivia declara la guerra a Chile y pierde su salida al Pacífico.
1891: Se firma en España el laudo arbitral sobre los límites entre Venezuela y Colombia.1896: El físico francés Henri Becquerel descubre una nueva propiedad de la materia que recibe el nombre de "radioactividad".
1909: Nace en Caracas el científico Arnaldo Gabaldón, erradicador de la malaria en Venezuela. 1910: Estreno del Himno del estado Bolívar, letra de José Manuel Agosto Méndez y música de Manuel Jara Colmenares.
1927: Nace en Barquisimeto, el músico Vinicio Adames. Murió junto con los miembros del Orfeón Universitario, el 3 de Septiembre de 1976, cuando el avión en que viajaban se estrelló en el aeropuerto de las Islas Azores. Nace Harry Belafonte, cantante y actor estadounidense
1932: El primer crimen del siglo: Secuestro del hijo del aviador Charles Lindbergh.
1938: Muere Gabriele D’Annunzio, poeta y político italiano
1947: Comienza a operar el FMI.
1950: Estalla una huelga petrolera en el estado Zulia que solo dura dos días.
1953: Evacuación de las últimas tropas británicas de la India.
1967: Secuestro y asesinato de Julio Iribarren Borges, ex director del Seguro Social. Las fuerzas armadas de liberación nacional, en voz de Elías Manuitt Camero, se atribuye en Cuba el cobarde crimen.
1974: Siete de los más íntimos colaboradores del presidente estadounidense Richard Nixon son acusados de participar en el escándalo "Watergate".1987: En una reunión convocada por la ONU un grupo de expertos advierte sobre la amenaza que representa el agujero de la capa de ozono.
1992: La mayoría de la población de las Repúblicas yugoslavas de Bosnia-Herzegovina y Montenegro se pronuncian en referéndum a favor de su independencia.
1996: 123 personas fallecen en un accidente aéreo en Arequipa (Perú).
2006: Inaugurada la Central Hidroeléctrica de Caruachi. Tiene una altura de 50 metros y cuenta con una longitud de 5.728 metros.
2008: En una operación conjunta el ejército colombiano dio de baja al terrorista de las FARC, Raúl Reyes, 2º jefe del Secretariado, acusado de narcotráfico, secuestro, desaparición de personas, homicidio, reclutamiento de menores y actos contra el Estado. Hugo Chávez advierte a Uribe, que si realiza un ataque militar en territorio venezolano contra las FARC, similar al realizado en Ecuador, sería "causa de guerra" y le enviaría los Sukhoi, y, para vergüenza nacional, pidió un minuto de silencio por el terrorista desaparecido.
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27 de febrero de 2010

Confucio el confuso

Una desenfadada reina de belleza afirmó en una de esas entrevistas que les realizan ante el jurado para demostrar que estas jóvenes son algo más que nalgas y siliconas, que Confucio era el “inventor de la confusión”, pero ignorancia aparte la verdad es que observando los pujos ideológicos de partidos de oposición e individualidades políticas que han abandonado las filas del chavismo, para colocarse en alguna corriente socialista inédita, pareciera que Confucio, en su calidad de inventor de la confusión, los guía.

En estos días escuché a un prominente líder regional explicar por televisión que su partido era socialdemócrata y, además, socialista democrático, o sea, socialista al derecho y al revés.

Exactamente como la reina de belleza pero a ritmo de tango, pues socialismo y democracia son términos excluyentes, sin posibilidad de conciliación, pero la idiotez sigue citando a los países escandinavos, a Chile y a Brasil como ejemplo de “socialismo democrático”, cuando son sólidas democracias liberales con gobernantes de cualquier signo, como el cambio que acaba de suceder en Chile.

Pero hay otro más risible, un tal Henry Falcón que renuncia a la secta satánica llamada PSUV – pero aclarando que está con Chávez hasta el oído medio - y se mete al PPT - la manzana se pasea de la mesa al comedor - .porque desea construir un “socialismo participativo”, ¡vaya pa´lauyama! Socialismo es a participación lo que caníbal a vegetariano, porque la economía y la política socialistas son planificadas por el Estado central (en nuestro caso en Cuba) y las directrices bajan para su estricto cumplimiento por focas entrenadas para obedecer, por eso llamar “Federal” al Consejo de gobierno socialista que acaba de sancionar Chávez es una inmensa contradicción.

Pero la idiotez se extiende y vemos a conspicuos sindicalistas opinar haciendo pucheros, que a las empresas de Guayana, quebradas por el sistema socialista en el ejercicio de su función primordial de arruinar lo productivo para generar la sumisión por la subsistencia, “no ha llegado el socialismo”, consecuencia de la ignorancia que confunde socialismo con “capitalismo pa´los obreros”.

Por eso Chávez seguirá y seguirá hasta que una nueva generación sea capaz de ser varón – Uribe dixit - y mandar al fulano socialismo al carajo y ofrecerle al pueblo una alterativa real de desarrollo.

Estos seguidores de “Confucio el confuso” le han hecho un inmenso daño a la política nacional con sus vaguedades ideológicas que les han impedido llamar las cosas por su nombre y definir ante el pueblo el auténtico significado de un hombre como Chávez en el poder, que, entre paréntesis, sí está claro en su posición: Es comunista, es decir, concentra los medios de producción – o sea, el capital - en el Estado, planifica la economía según su real gana, elimina o deprime la propiedad privada y resigna la subsistencia salarial de los ciudadanos en general, al presupuesto del Estado, para la necesaria colectivización – masificación – de la sociedad.

Por lo tanto, todo socialista venezolano de oposición es chavista en algún grado, lo que no comparte es a Chávez. El problema de estos chavistas sin Chávez, deriva de la falsa dicotomía entre sociedad e individuo que presenta el antagonismo socialismo vs liberalismo, y es falsa porque socialismo no construye sociedad sino masa dependiente del Estado, es el liberalismo el que basando su doctrina en la libertad, que es individual, propende la formación de sociedades productivas y autónomas que mantienen al Estado.

El socialismo – todos los socialismos – propugnan la destrucción del capitalismo para, supuestamente, hacer prevalecer los intereses generales sobre los particulares - bien por la fuerza como en Cuba o en la Unión Soviética o por las reformas progresivas de la socialdemocracia, que es una escisión del comunismo, que en la práctica ha resultado en gobiernos mezcla de estatismo con libre mercado: “Tanto mercado y tanto Estado, como haga falta”. Lo que Bobbio, buscando oxigeno, llamaba “socialismo-liberal”. O sea.

Socialismos como arroz

Pero eso no es nuevo ni es una característica venezolana, sino que es inherente al asunto electoral producido por el clientelismo político que se sustenta en el mito “nosotros los pobres” vs “ustedes los ricos”, sin distinguir pobres por viciosos ni ricos por ladrones.

Como las promesas socialistas son bien bonititas pa´los pobres, aunque falsas – porque es imposible repartir una riqueza que no se produce y, además, la igualdad por decreto solamente puede ser por debajo - y el liberalismo sólo ofrece trabajo y más trabajo hasta que la muerte nos separe y la igualdad es ante la ley y cada quien surge de acuerdo a sus capacidades, es machete para conseguir votos mentir con el socialismo como compendio de “justicia social” que es traducida por el pueblo como “conceder privilegios por la simple existencia”: Nací, por lo tanto me tienen que dar lo mismo que el otro ha adquirido con su esfuerzo. Y así se exime al individuo de toda responsabilidad con su destino personal.

¡Qué vaina tan bella! La verdad es que la “justicia social” no es otra cosa que filantropía o caridad estatal. Conducta ejemplar en el área privada, individual, pero nefasta en lo público y perversa en lo político.

Los regímenes de fórmula socialista, todos autoritarios y estatistas y ninguno, ni por asomo, porque no puede serlo, democrático, son variados, entre ellos destacan el comunismo (supuesto paraíso social marxista “a cada cual según sus necesidades”, que jamás se ha concretado por la estupidez criminal de la dictadura “del proletariado” (socialismo real) que, como sostenía el confuso Proudhom: es una contradicción que propugna esclavizar al individuo para hacer “libre” a la masa), la socialdemocracia (colectivización de la sociedad a fuego lento donde aterrizan todos los comunistas espantados de la realidad confundiéndose en un solo patuque con adecos y copeyanos que también se metieron), y…

El nazi-chavismo

Tanto en el nacional-socialismo (nazismo) como en el chavismo, la célula social fundamental no es el Estado, sino el "Pueblo", pero configurado según criterios raciales: En el caso de Hitler, la superioridad de la raza aria; con Chávez, de los indios y negros.

Es la raza, por lo tanto, la que genera las claves de acceso, por su poder comunicacional interno, que producen los fuertes lazos afectivos entre el Pueblo y su líder masivo. Por eso se llama al líder del proceso nazi Führer, es decir, el conductor, en el caso del chavismo, “Micomandante” traduce Führer.

Producto de la naturaleza de esta relación entre el líder único y su Pueblo (quien no lo siga o disienta o critique es no - pueblo), tanto en el nazismo como en el chavismo, el hecho de que ejerza también constitucionalmente la Presidencia de la República es secundario, pues es ese Pueblo el que le insufla el poder suficiente para dirigir el Estado de forma omnímoda y ese poder no reconoce límite alguno, pues se ejerce para servir al "Pueblo". Por lo tanto el Estado, para el nazismo y para el chavismo, es sólo un simple aparato jurídico que sirve al Pueblo (Poder Popular), a través del uso ilimitado del poder político que ejerce el Führer o Micomandante.

Por eso, en el nazismo, como en el chavismo, lo central es entonces la comunidad (comuna) o Pueblo seducido, organizado y estructurado sobre criterios raciales, controlado por violentas bandas armadas “camisas pardas” o “franelas rojas” mientras se transforma el ejército en aparato de represión interna (milicias urbanas y campesinas).

En cuanto al individuo, éste está subordinado al Pueblo, sólo tiene derechos en la medida que es parte de él y participa para asegurar la satisfacción de los intereses de la comunidad, no tiene derechos por y para él. “Tú no eres nada, tu Pueblo lo es todo”.

El chavismo, entonces, es una fusión entre el nazismo como Poder sustentado en “su” Pueblo y el comunismo en cuanto capitalismo de Estado. En ambos, en la praxis, el fundamento es el ejército y no la ideología.

En conclusión

Como decía el chavista Joselo en un sketch: O eres molusco o eres marisco. No hay más opciones. ¿Crees que: El derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad son fundamentales de la persona humana, el individuo es la célula fundamental de la sociedad, la persona no debe tener amo, ni público ni privado, toda persona debe recibir una recompensa acorde con el esfuerzo realizado, la libertad es un bien supremo por encima de la igualdad, debemos entendernos con quienes piensan diferente y no exterminarlos, cada quien debe surgir de acuerdo a sus capacidades, toda persona es responsable de las consecuencias de sus actos, los países progresan por el trabajo de sus pueblos? Entonces, amigo, eres liberal, déjate de zarandajas y vente pa´cá. A edificar el progreso colectivo por el desarrollo individual, a través del trabajo, el estudio y la responsabilidad.
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24 de febrero de 2010

¿Dólares sin ideología o sinvergonzonería?

Chávez, atrapado, sin salida, en la crisis energética provocada por su ineficiencia y traición al desarrollo de la patria, al desviar los recursos para la inversión en mantenimiento y generación eléctrica a fines de exportación ideológica a la chulería latinoamericana que se lo goza, justifica la compra vía emergencia de plantas termoeléctricas a los Estados Unidos, es decir al imperio que maldice y jura destruir con sus milicias paramilitares inconstitucionales: “Estamos trayendo unas máquinas de la General Electric, empresa de los Estados Unidos. Esas plantas no tienen ideología, no tienen que ver con un gobierno y otro, o las relaciones entre ellos. Nosotros le mandamos a Estados Unidos un millón y medio de barriles diarios de crudo.”. Con estas palabras este personaje de la picaresca histriónica nacional confiesa la característica “chinvergüenchona” de su posición política.


Mantiene a sus débiles mentales encandilados y “enfusilados” – verbigracia la palúdica milicia campesina – con las denuncias de una supuesta invasión del “imperio mesmo” con el que lleva excelentes relaciones comerciales a dólar limpio, lo que ya fue dicho a los gringos en claro mensaje en sus primeros días de gobierno: “No vean lo que yo digo, vean lo que yo hago”, es decir “fíjense que mi discurso es para engañar a estos pobres idiotas que votan por mí, no contra ustedes”.

Por eso fue que Alán García lo desnudó cuando develaba un supuesto plan de Estados Unidos, bajado de Internet por alguno de los aduladólares que lo exponen a la burla colectiva, diciéndole en cadena mundial: “Los gringos no tiene que invadirte para quitarte el petróleo, pues tú le vendes todo el que ellos quieren”. Pero como la “patria” es el mantra que concita la efervescencia de la sentina del patrioterismo, su invocación sirve para afianzar canallas en el poder. Y de eso se trata todo esto: Sin los dólares del imperio, Chávez no es nadie ni nada.

Su pretendido liderazgo continental es un sainete de los gringos: Son los dólares del imperio – no los sucres del Alba – moneda de chocolate - ni los risibles bolívares “fuertes” - los que financian las revoluciones socialistas de esta cuerda de sinvergüenzas, como Fidel Castro y Daniel Ortega, cuyas economías sobreviven gracias a la filantropía de un mundo idiota que no tiene responsabilidad con sus donaciones. Y hay que recordar que para los Estados Unidos “bisnes is bisnes” y bajo ese axioma cínico mantuvo a Sadam Husseim en el poder hasta que perturbó sus intereses en el Medio Oriente y lo mismo ocurrió con Noriega en Panamá y con Somoza en Nicaragua.

Así que Chávez con toda su perorata antiimperialista y sus amenazas tremendistas, no es más que un lacayo fiel del imperio, auque alguna vez intercambie expulsión de embajadores, pero sin afectar el munífico suministro de dólares. Lacayo cumple, amo paga. Y punto. “Yeah, yeah, llena tanque, muchachou”.

La dependencia sinvergüenza

Destruir obviando la capacidad para construir, es la filosofía de las revoluciones comunistas, por eso Chávez destruye las empresas de Guayana y PDVSA, pues eso es, para su inmensa ignorancia, ser revolucionario, no convencer sino someter y el hambre es una excelente herramienta.

Fidel, por citar al más conspicuo de estos especímenes latinoamericanos, se apoderó del poder en Cuba, cuando “la isla ocupaba el tercer puesto entre las naciones más desarrolladas de América Latina, después de Argentina y Uruguay, con una alfabetización superior al 90% y con un sistema de salud pública que ocupaba el tercer lugar en el mundo en cantidad de médicos y camas por persona.

Su tasa de mortalidad, incluyendo la mortalidad infantil, era la más baja del planeta con 5,8% (EEUU 9,5% y Canadá 7,6%). En materia nutricional se ubicaba en el puesto 26 a escala mundial y en kilómetros de vías ferroviarias y carreteras, en el número 13. Ocupando el segundo puesto en AL en automóviles, televisores y radios. Según un anuario estadístico de la época, en 1958 Cuba ocupaba el tercer lugar en número de habitantes con teléfono privado. Su pujante clase media representaba el 40% de la población”.

Hoy, 51 años más tarde, luego de una sistemática destrucción de lo existente, el pueblo cubano sobrevive chapoteando en la miseria más infame bajo un régimen de oprobio mil veces peor que el de Batista, mientras el inútil de Fidel – que se paga sus lujos amparando al narcotráfico y prostituyendo jóvenes universitarias a las que envía a las islas turísticas del caribe a buscar dólares – sigue culpando de su propio desastre al embargo de los Estados Unidos, que ni es tanto ni es para tanto, pues la Unión Soviética le suministró 250 mil millones de dólares – de ellos cien mil en petróleo que revendía - por el lujo de tener un enclave de esclavos a 90 millas de la libertad.

Y la realidad es que los Estados Unidos no suspende el embargo por culpa de Fidel, ya que los tres millones de cubanos que han escapado de sus garras hacia Miami se han convertido en un poderoso factor electoral que es el que se niega a suspender el embargo. Pero, además, el sinvergüenza de Fidel se pasó la vida recibiendo limosnas de los yanquis, como barcos de pollo, medicinas, trigo, que su régimen corrupto vendía al pueblo en el mercado negro. Y todavía, cada vez que la naturaleza se ensaña con la isla, el odiado imperio le saca las patas del barro a Fidel que ni por asomo se le ocurre rechazar la bofetada gringa.

Como paradoja, ninguno de estos gobiernos comunistas ha podido demostrar la superioridad de su sistema económico aprovechando la cíclica crisis del capitalismo, Fidel fue el primero que salió pidiendo cacao cuando el reciente desplome financiero del sistema global.

En lugar de mostrar la musculatura de su sistema, salió llorando porque se reducían las limosnas filantrópicas con las que da de comer a su magro pueblo. Y tiene las gónadas de hablar de “soberanía”, un pueblo hambriento y enfermo, sin agua ni luz ni es soberano ni es pueblo ni es nación ni es país.

Así el comunista Chávez – imitando a Fidel que ya no tiene como pagar las crecientes importaciones alimentarias, porque nadie le fía por tracalero, pues desde 1986 se ha negado a pagar su deuda externa - acabó con la seguridad alimentaria de la república llevándola a un estado de dependencia extranjera como jamás nunca tuvo – ahora instala fábricas de alimentos en Bolivia y en Cuba - pero vocifera de “libre determinación” y “soberanía”, estimulado por los dólares gringos, que es la moneda nacional en la práctica y a cuyo destino está atada nuestra economía, precisamente por la disparatada política económica comunista que Chávez ha implantado para favorecer a los gringos y demás empresarios extranjeros.

Por eso el hipócrita Lula lo alaba: Venezuela produce petróleo, los gringos lo compran en dólares y estos se los lleva Lula y los mismos gringos y los argentinos... exactamente igual como pasó con la riqueza de América saqueada por España que terminó en los bolsillos de los banqueros holandeses, mientras los españoles se morían de hambre.

Los dólares sí tienen ideología

Los dólares sí tienen ideología, son liberales, capitalistas, quienes carecen de ideología son esta cuerda de sinvergüenzas que hacen promesas a sus pueblos contando con aquellos.

Lo he dicho en otras ocasiones, lo que derribó el Muro de Berlín no fue la política ni el poderío atómico de Occidente, sino los barcos gringos cargados de trigo en los puertos de Moscú, fueron los dólares del imperio los que salvaron de la espantosa hambruna al, y que, “poderoso” imperio soviético, una magalla artificial que impuso, con los fusiles – “¿dónde está tu fusil?” - la miseria general, como en Cuba donde un ejército de 350 mil soldados ideologizados, un millón de esclavos públicos extorsionados y una red de sapos despreciables de los Comité de defensa de la revolución, mantienen en un puño de hierro a diez millones de seres humanos, de los cuales más de medio millón agoniza en cárceles inmundas, en las narices de la idiotez del mundo que se desvive por una foto con el déspota moribundo Fidel Castro Ruz. ¿Dónde se la irá colgar la vieja estúpida de Bachelet cuando se devele toda la ignominia de ese régimen criminal?

En conclusión

Cuando un hombre se enfrenta a su realidad es cuando tiene la oportunidad de demostrar sus principios. Si la contundencia de la verdad lo hace claudicar es un sinvergüenza. Chávez hoy, frente a su realidad, atrapando un salvavidas lanzado por sus enemigos jurados Estados Unidos y Colombia, está demostrado ante el planeta lo que en verdad es. Aplique usted el calificativo.

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20 de febrero de 2010

No basta jalar…

Los ingenuotes chavistas boquiabiertas, conectados a la godarria, que disfrutan los privilegios de la cercanía con el poder, aprovechando debilidades éticas y la connivencia de la incondicionalidad para hacer fortuna mal habida, ignoran lo que significa la afirmación “Chávez es comunista”.

En su debido momento, cuando al déspota le haga falta sangre para saciar la sed de la bestia que lo encumbra, no vacilará en degollarlos como a cerdos, para exponerlos en garfios ante el populacho ebrio. Y es que la estupidez es infinita, declama loas al verdugo cual lechón cantando gaitas en Navidad.

Es muy difícil creer que sujetos deslumbrados por el lujo, que se desplazan en lujuriosos vehículos de costos astronómicos y se dan vida de sultanes árabes, sean partidarios de la severa austeridad espartana que predica el comunismo para crear en la psiquis de los desposeídos la falsa premisa que sustenta la condición zarrapastrosa como virtud política, para perpetuar al caudillo en el poder en su nombre – Stalin Fidel, Chávez - pero guarecido por un poderoso ejército corrupto cuya misión es producir parálisis social por el terror.

Estos inescrupulosos están convencidos de poder escapar a tiempo, antes de que se desate la decapitacion de traidores a la revolución, que será todo aquel que ose usar corbata o bañarse o encender la luz en el período de reafirmación revolucionaria que se avecina y del cual los Carapaicas “comunismo o muerte” han emitido ya su dictamen, previa consulta con Chávez – no se mueve una hoja sin que “micomandante” lo ordene.

Y es que la estulticia obvia, bajo los efluvios de la juma de ayer, que Chávez es esencialmente una entidad totalitaria genética – el apodo juvenil “el loco Hugo” que, aunque derivado de su personalidad estrafalaria, en realidad encubría el genio destemplado y violento que le permitía imponer su voluntad.

Y las entidades totalitarias, en el ejercicio del poder, producen el miedo que les permite transformar sus caprichos en leyes y éstas en legítima aspiración de la debilidad mental que se siente representada en su discurso supuestamente humanista.

Por ello, seguro estoy, de que no le temblará el pulso – émulo de Calígula – para lanzar por el balcón del ludibrio a diosdados, josévicentes y rangelesgómez – el cementerio de “próceres” necesita ampliación - cuando la necesidad de hacerlo le llegue, por mucho que se afanen en competir por la jalada de platino que suele recibir en su Aló, presidente, que se convirtió, de un programa de participación popular para tratar los clamores del pueblo, en un ejercicio maniático de loas a su ego de discípulo sobredimensionado de Fidel, mientras una corte pusilánime aplaude con los codos cada amenaza contra las libertades civiles que los incluye por mampuesto, por el secreto anhelo de permanecer arrebujada en el regazo del temperamental comandante-presidente, famoso por la repartición proporcional de cachetadas entre sus áulicos.

Que triste espectáculo de estos aduladólares del César, impedidos de percibir que, a pruebas vistas – verbigracia el extorsionador Eduardo Samán - no basta jalar: Aunque atribuyan todo el reconocimiento de su esfuerzo a la inspiración divina de “mi comandante Chávez”, en una orgía de servilismo decadente que produce asco incompasivo, al final, igual serán defenestrados y los ramirovaldeces – corruptos como aquellos, pero verticales en la entrega decúbito ventral - ocuparán su lugar... hasta el próximo descabezamiento... ad infinitum. Porque “hombre nuevo” venezolano no hay. Lo que hay es… cubanos de colmena, unos domesticados para la servidumbre y otros para la auto orfandad por la supervivencia.

Chávez es comunista

Chávez no se volvió comunista de la noche a la mañana: Allí están las declaraciones de Douglas Bravo, que refieren las reuniones que realizaban con el entonces cadete Hugo Chávez que ya era considerado un comunista infiltrado en las Fuerzas Armadas.

El alejamiento de Douglas Bravo fue por razones operativas, pues éste pensaba – como buen militante de esa secta de asesinos - que luego de obtener el poder por vía electoral, Chávez iba a ejecutar el programa de fusilamientos selectivos que sería llevado a cabo si triunfaba el golpe de Estado del 4F , pero Fidel le aconsejó, una vez salido de Yare, hacer las cosas paulatinamente - vaselina incluida - mediante un proceso de desmontaje institucional, captación de debilidades morales y estatismo financiero para el necesario control social por la subsistencia.

Así que Chávez es comunista – no socialista, aunque es la misma vaina, pero suena más inofensiva – y lo es del ala ortodoxa estalinista que sobrevive en el saurio Fidel, pues esa es la única manera de lograr morir de cien años ejerciendo el poder, como ya lo anunció cuando se asumió marxista, emulando a su titiritero en el engaño con costuras.

Lo que ocurre es que Chávez obtuvo el poder – por una de las más costosas equivocaciones, tanto popular como de la élite dirigente de entonces, de la que se tenga memoria histórica – en un país petrolero, en una época de alza de los precios del petróleo, que le ha permitido – lanzando monedas al pasar para crear el parasitismo social indispensable para ganar elecciones, transformando al Estado en el único empleador y aplastando medios de comunicación disidentes - avanzar con cierta flexibilidad que llena de esperanzas a los ciegos históricos, que juran por su mamacita de turno que si se portan bien modositos – haciendo llamados a la reflexión y a la rectificación - frente a esta feroz monstruosidad gramsciana, la quemazón no los chamuscará.

Y eso incluye por supuesto, a los de la godarria, que persisten en ignorar el peligro que se abate demencialmente sobre sus cabezas. ¿No les servirá de ejemplo el caso del insolente embajador cubano en Venezuela, Germán Sánchez Otero, por atreverse a pensar en una muy ligera apertura democrática para Cuba? Eso es para erizarle la epidermis a un caimán.

Chávez siempre ha dicho que es comunista

Si algo le reconozco a Chávez es que jamás ha mentido sobre sus aviesas intenciones. Por eso lo he adversado desde el propio 4F. Son sus esperanzados intérpretes de oposición quienes se han negado a reconocer la verdad.

Desde el primer grito de su fórceps político, Chávez manifestó su tendencia totalitaria y su intención de desmontar el orden republicano de la nación. Su premisa ideológica fue el pensamiento único propio del sectarismo comunista, afirmando que su proceso revolucionario no admite alternativa ni derrota.

Dijo, a quien quisiera escucharlo, que lo político privaría sobre lo económico y que, por lo tanto, no importaba el sufrimiento del pueblo porque lo primordial era la revolución – “pacífica pero armada” – y su implantación continental, para lo cual se ha aliado con los comunistas más furibundos, por atrasados, de afuera y de adentro.

En cada regreso de su filial periplo cubano, ha traído un módulo complementario para la edificación de su régimen hegemónico: El Partido del Estado totalitario: El PSUV, todavía lleno de oportunistas y encandilados, pero de planimetría comunista piramidal, listo para sustituir las organizaciones sociales independientes (sindicaros, gremios, etc.).

El Ejército del Partido: Las reservas militares ideologizadas, asimiladas de hecho a la Fuerza Armada y apoyadas por más de cien mil milicianos cubanos, a quienes se ha entregado la administración del país. Y el Pueblo estatizado: Las comunas o soviet, con sus CDR, que le alborotan las hormonas a los resentidos sociales.

Cuando comenzó su campaña de odio contra los Estados Unidos – altavoz de Fidel - en realidad era contra el capitalismo y engatusó a nuestros socialistas de oposición – que también son anticapitalistas - llamando “Socialismo Siglo XXI” al proyecto comunista diseñado por Fidel para apoderarse de las reservas petroleras venezolanas, para usarlas en el proyecto de esclavizar a los agónicos pueblos de estos tierreros latinoamericanos – FARC mediante.

En conclusión

El dogal que Chávez ha logrado ajustar alrededor del cuello institucional de la república sólo espera por un pequeño tirón. Pronto veremos jaurías de violentos desadaptados, vagos y sinvergüenzas, debidamente azuzados por esbirros cubanos, declarando de “utilidad pública” cuanto se le antoje.
La historia del llanto cubano ante el despojo de sus viviendas y empresas por hordas de fanáticos criminales ideologizados, aún late en el silencio de la brutal represión que ha mantenido por 51 años a esa nación bajo las miserables garras de un ejército de ladrones dirigido por un gángster. Cualquier parecido es realidad potencial. Hace falta lucidez y coherencia para arrancarle la patria de sus fauces.
Rafael Marrón González

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13 de febrero de 2010

Vaticino la derrota del enemigo

Usando el lenguaje de “tierra arrasada” propio del militarismo ramplón, atrasado, ignorante y corrupto, que ha asolado la dignidad de los pueblos de América – deshonrando la imagen de la institución militar – aunque en estos tiempos paga sus horrendos crímenes en cárceles argentinas o chilenas y hasta europeas, los godarriudos chavistas “vaticinan la derrota del enemigo” en las elecciones de septiembre.

Para la psiquis criminal de este bastardaje pre-político, los adversarios ideológicos somos “enemigos”, es decir objetivos a destruir por la fuerza de la violencia.

Sin embargo, no son precisamente ellos quienes se encargarán de la matanza, el discurso violento implícito en la frase “derrotar al enemigo” – así como el sacrilegio de blandir la espada de Bolívar – que es un símbolo de unidad de la venezolanidad - en un pueril acto proselitista repleto de tarifados - está dirigido a los débiles mentales – en honor a la verdad psicópatas, “ciegos esclavos que pretenden imponernos las cadenas que ellos arrastran” (Bolívar dixit) - que les sirven de ariete contra la civilización.

Son demasiado cobardes para enfrentarse de hombre a hombre ni con el más débil de nosotros. Para eso está el lumpen envilecido por la impunidad, que por manipulación mental confunde crimen con discurso y presta su innata maldad para sustentar las ansias de poder de cualquier grupete de inmorales.

Las concentraciones chavistas en Caracas – cada día más reducidas, pronto las efectuarán en una cafetería - del 23 de Enero – inmensa contradicción de un militarista celebrando el día del derrocamiento del militarismo, con un dispendio de 7 mil millones de BsF a pesar del drama de la pobreza que sufre Venezuela cuyos índices son manipulados por un obediente del INE – y del 4 de febrero, aniversario de la derrota y encarcelamiento del golpista, que, en el colmo de la megalomanía, ha bautizado como “día de la dignidad” – será de la indignidad de su cobardía que lo enterró en el Museo Militar, donde dejó su impronta gástrica, mientras sus hombres morían – fueron una demostración de miedo cerval de la impudicia chavista que sabe que se quedó sin pueblo, porque el pueblo ya es ducho en identificar ladrones y canallas.

Cada enjuiciable – ya el Tribunal Penal Internacional sentenció que los presidentes y funcionarios en ejercicio podían ser juzgados - trato de superar al otro en amenazas contra la juventud venezolana – tildada por el fascista lleno de odio Chávez, para justificar la brutal represión, de “fascista llena de odio” - porque no se cala los abusos de estos decrépitos viciosos y les cogió la calle con sus protestas y los retó el 4F y los derrotó el 23 de Enero con una concentración popular masiva que tuvo la virtud de emitir un claro mensaje del espíritu libérrimo de nuestro pueblo venezolano, que no va a permitir – y métanse eso en la cabeza – que se les frustre su futuro para favorecer al lumpen que por carencias genéticas medra de las migajas que les sobran a la opulencia de los fascistas del gobierno, alquilando su genética destructiva.

Este sí es “el enemigo” que la sociedad venezolana integrada por el pueblo esperanzado se ha determinado derrotar en todos los terrenos. De allí el pavor frío del anciano en fase terminal que gobierna Venezuela por títere interpósito, pues el final de este régimen significa el final definitivo de la deshonra cubana.

El enemigo verdadero

86% del pueblo venezolano rechaza contundentemente al marxismo fidelófilo de Chávez, eso significa que solamente una mínima fracción apoya ese sistema perverso generador de miseria y atraso, y de ese porcentaje, seguro estoy, más de la mitad es por ignorancia – confunden asistencialismo estatal con comunismo - por falta de un coherente discurso opositor que lo confronte con su propia realidad, porque, por desgracia, en este país los políticos son, en mayor o menor gado, socialistas, adjetivándose como inocuos, implorantes, recoletos o cooperantes, por no reconocer que la única alternativa frente al marxismo es el liberalismo – como lo han demostrado las pujantes economías de Chile y Brasil, pese a sus presidentes izquierdistas - porque todo socialismo, para serlo – si no, no lo es - elimina la propiedad privada y la libre empresa y somete al individuo a la voluntad del amo Estado a través de la masificación de la sociedad. Así que el verdadero enemigo del pueblo es quien intenta imponer desde la aplastante fuerza del poder – y la connivencia de la corrupción - el comunismo en Venezuela.

Las causas contra el enemigo

Es interminable el memorial de agravios contra el auténtico enemigo de la patria que vulneró la seguridad alimentaria al destruir el aparato productivo nacional, generando inflación, escasez, desempleo y dependencia extranjera; ridiculizó el valor de nuestra moneda afectando la autoestima nacional y la capacidad adquisitiva de los trabajadores; minimizó la productividad y competividad de PDVSA y arruinó las empresas de Guayana; humilló la dignidad de las Fuerzas Armadas; dilapidó una fortuna de cientos de miles de millones de dólares en once años, precarizando, como consecuencia, los servicios públicos y la vialidad y ocasionando el colapso de la infraestructura y equipamiento nacional por falta de inversión en mantenimiento, adecuación tecnológica y sustitución, como ha sido el caso del sistema eléctrico, que sucumbió por la negligencia de un gobernante - que sigue mintiéndole al pueblo sobre las verdaderas causas de este desastre y le endosa penalidad a los usuarios, en lugar de reconocer virilmente su responsabilidad.

Un Jefe de Estado que… reforma la Constitución con leyes caprichosas; divide perversamente a los venezolanos – declarando públicamente su oposición a cualquier posibilidad de reconciliación nacional al exigir a los ciudadanos que “escojan su bando” - ¿para crear las condiciones de una guerra civil? - conspira con los demás poderes contra el orden republicano de la nación; desprecia la venezolanidad (se expresa con acento cubano, grita viva Cuba en lugar de viva Venezuela y canta el himno cubano, privilegia semi profesionales cubanos sobre los profesionales venezolanos, entrega a cubanos – que conforman un poderoso ejército invasor de mercenarios - delicadas funciones de Estado en todos los estadios de control de la vida nacional comprometiendo la seguridad y soberanía nacional – casos SAIME y Ministerio de Sanidad - sumisión que sonroja la dignidad del patriotismo; deposita la responsabilidad de velar por la integridad del primer magistrado de la nación a militares cubanos, incluyendo a pilotos del avión presidencial, que pertenece a Cubana de aviación, es decir soberanía cubana en los cielos internacionales con el Presidente de Venezuela abordo - (¿por qué Fidel, en reciprocidad solidaria, no lleva chavistas a Cuba a ocupar los mismos cargos que los cubanos usurpan en Venezuela?); criminaliza las protestas sociales y la defensa de los derechos laborales con total desprecio por la vida humana; atenta contra la propiedad privada con confiscaciones inconstitucionales que generan desempleo e incertidumbre y aleja las inversiones, con el consecuente deterioro de la economía; protege bandas armadas para sojuzgar a la oposición y constriñe la libertad de expresión deteriorando con ello la democracia; violenta relaciones diplomáticas históricas con naciones vecinas y países amigos; es acusado de connivencia con fuerzas consideradas terroristas; mantiene alianzas con gobiernos forajidos exponiendo a la nación a peligro de guerra, ruptura de relaciones diplomáticas, represalias económicas y agravios (artículo 464 del COP Militar), además de quebrar el pacto social, que corrompió la moral pública, propiciando el desbordamiento de la delincuencia… es sin lugar a dudas un enemigo al que es imperativo vencer con la fuerza de la convicción moral patriótica, a través de la política de penetración concienciadora y del voto derivado de la responsabilidad con la patria y sus elevados intereses.

En conclusión

El militarismo chavista se expresa en dogma sectario que conculca las libertades públicas y somete al pueblo a penurias insoportables por su ineficiencia y corrupción. Así que, vaticino la derrota del enemigo. Y lo derrotaremos porque somos más, somos mejores y tenemos razón.
Rafael Marrón González
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6 de febrero de 2010

Como sapos a punto de hervir

Sinceramente no logro comprender la posición de la llamada “oposición oficial” frente a los desplantes patoteros de Chávez y la obediencia perruna de su corte de aduladólares, que le sancionan todas las leyes que la Sala Situacional cubana de Miraflores redacta y envía a la Asamblea Nacional cada vez que Chávez desea conculcar un derecho ciudadano – con efecto retroactivo - y en las cuales pivota su autoritarismo.

Contradictoriamente cobijada bajo la esperanza de ganar las elecciones del difuso septiembre, permite en silencio que Chávez desarrolle toda la arquitectura de un fraude leguleyizado, por miedo a que si se protesta en la calle con la contundencia imprescindible, y emprende una campaña por radio y prensa y pintas callejeras señalando el obsceno abuso de poder de Chávez, el autócrata suspenda las elecciones y, al contrario, emite a los electores una falsa seguridad, con la consigna triunfalista que perjura la derrota chavista, “haga lo que haga” Chávez.

Los líderes “cara de vidrio” aconsejan no hacerle caso a los “trapos rojos” ni “lloriquear” por el abusivo cambio de los circuitos electorales, que favorece groseramente al oficialismo, pues para realizarlos no se aplicaron criterios técnicos sino políticos, evidenciado esto con la aplicación de fórmulas distintas para realidades idénticas, como el caso de Ciudad Guayana vs Valencia y Maracaibo, para inclinar la balanza hacia el chavismo; ni por la ley electoral - que legaliza la violación al precepto constitucional que establece la equidad del voto - mediante la cual con el 45% de los votos Chávez obtendría el 80 % de los cargos – el voto chavista vale el doble del voto opositor; ni por el nombramiento vulgar de dos rectores del CNE reclutados de las filas del PSUV, “al cual renunciaron”, lo que produce preocupación en la ciudadanía que está recibiendo mensajes triunfantes de sus líderes, sin relación alguna con la realidad, lo que puede derivar en una inmensa abstención, porque las encuestas señalan seriamente que los llamados “ni ni” - electores no alineados - aglutinan el 52% del electorado y por lo tanto representan el poder decisorio en estas elecciones, por lo tanto hay que hablarles claro y mostrarles las estrategias que permitirán derrotar las trampas de un Chávez que amenaza con guerra si pierde la mayoría en la Asamblea Nacional, solamente porque con ella perderá la careta democrática – Constitución plegable mediante - que le ha permitido sojuzgar el Estado de derechos con leyes instantáneas, con la complicidad de los poderes que han traicionado el orden republicano de la nación, y tendrá, entonces, que declararse dictador, como las lacras Mugabe, Fidel y Omar el Bashir, y renunciar a sus viajecitos internacionales a mimetizarse entre la idiotez democrática mundial, que por petróleo da el menor.

El suicidio de las ballenas

Esa actitud del liderazgo opositor partidista nos permite escuchar nítidamente como crece la yesca sobre las libertades del pueblo venezolano chavista y no chavista, pues es insólito su pasivo ajuste a la reducción farisea de su espacio político, suicidamente indiferente al procedimiento para hervir sapos que Chávez le está aplicando – incluyendo la llegada, y que a asesorar en “materia energética”, del feroz exterminador cubano Ramiro Valdés, experto en represión, fusilamientos, tortura, espionaje y censura, responsable de miles de desapariciones forzadas en Cuba, lo que marca la entrega oficial de nuestra soberanía a una nación extranjera – justificado con la esperanza de cambiar el rumbo autocrático de Chávez derogando las leyes espurias en las que está pivotando sus violaciones constitucionales obviando que Chávez se repasa por el forro el sistema legal íntegro, amparado en el poder omnímodo de su inescrupulosidad, Amargo será el arrepentimiento de quienes por connivencia, ignorancia, cobardía o resentimiento social, se están prestando para legitimar las acciones antidemocráticas de este régimen corrupto e ineficiente.

Empresariado a fuego lento

En esta absurda posición autista que espera que Chávez “reflexione” – hay que ser bien romántico para creer que alacrán suspira – tenemos el caso del empresariado - industrial, bancario y comercial – que, pretendiendo segregar piedad al verdugo, se dedicó a negociar con Chávez el fogón que los sancocha, mientras se negaron, por oportunismo, a apuntalar las trincheras comunicacionales de la lucha democrática, sobre todo en las regiones, argumentando que “su responsabilidad era con sus empresas”, que de todos modos van a perder, pero con el desdoro de la complicidad por omisión, propiciando tangencialmente la agonía de medios impresos y programas radiales críticos, estos últimos censurado también por la tortura social del racionamiento eléctrico.

Y mientras el empresariado actúa como gallina empollando huevos de caimán, Chávez ha ido creando toda la infraestructura leguleya – como la recién sancionada Ley de Depabis, que elimina las garantías constitucionales de la propiedad privada y, por lo tanto, la libre empresa - para asumir directamente desde el Estado, y con los costos operativos cargados al presupuesto nacional, en detrimento de hospitales y escuelas y de todos los servicios públicos, de la importación, distribución y comercialización de equipos, productos e insumos de absolutamente toda la escala de consumo.

La restricción del servicio eléctrico a los centros comerciales tiene como finalidad propiciar la quiebra del comercio para apoderarse por “utilidad pública” – confunde adrede “público” con “gobierno” – de estas instalaciones para la comercialización de sus importaciones, en el desarrollo de su proyecto de control social.

El colmo es que hasta la vetusta imprenta nacional ha sido habilitada para recibir encargos menudos del público. Y como broche de oro, se sanciona la Ley de Contraloría Social que otorga poder a los fanáticos enrojados de furia destructiva, para actuar a su arbitrio contra el empresariado y pequeños comerciantes en nombre del Estado. Pero todavía hay demasiados que siguen en Babia, empecinados en dialogar con Chávez, como si fuera factible ablandar cogote de burro con chamizas.

El mensaje del uniforme

El jueves 28 de enero, Chávez encadenó al país para, con su acostumbrada vulgaridad genética, atacar lo que en su ceguera histórica llama “la oposición”, sin percibir que esa “oposición” que está en la calle es el pueblo indignado que reclama sus derechos, que ya intuye que detrás del señuelo populista se esconde el garrote miserable de la dictadura, que, con la fórmula de hervir sapos, ha ido desatando en la patria de Bolívar.

Y mientras esa oposición traga gas y perdigones y sus hijos son vejados por el odio inquilino de la barbarie criminal chavista - que pretende insultarlos llamándolos “manitas blancas” para contrastar con las suyas tintas en sangre - la otra, la oficial, sin acción para capitalizar políticamente las inmensas protestas que recorren todo el territorio nacional, y pasiva ante las acciones que obstaculizan la limpidez del proceso electoral venidero o la imputación de periodistas o la destrucción de la economía y la vulneración de la libre empresa y de la propiedad privada, parece concentrar toda su atención en llenar planillas para conseguir empleo en la Asamblea Nacional, cuyos sueldos paga Chávez. Pero, lo que deseo destacar de esa cadena, es que por primera vez Chávez lució casaca y arreos de Comandante en Jefe, un grado civil inherente a la presidencia de la república, que manifiesta la subordinación de la estructura militar al poder civil, y que por su psiquis totalitaria y desprecio absoluto por el hilo constitucional, convirtió en jerarquía militar, lo que significó el segundo golpe de Estado contra el orden republicano - el primero fue la Constituyente que cohonestaron los poderes públicos del pasado, con énfasis en la extinta Corte Suprema de Justicia, exactamente lo que impidieron los demócratas con los redaños bien puestos, en Honduras, que sacaron a patadas al émulo de Chávez.
La imagen del jefe de Estado en prendas netamente militares, anunció al país ese día y en esa hora, que el gobierno de la república se ha asumido militar, lo que contradice el espíritu constitucional civilista y viola el artículo 330 que establece que “los o las integrantes de la Fuerza Armada Nacional en situación de actividad tienen derecho al sufragio de conformidad con la ley, sin que les esté permitido optar a cargo de elección popular, ni participar en actos de propaganda, militancia o proselitismo político”. Y ese mensaje implícito en ese uniforme inédito significó que, con el apoyo del ejército invasor cubano, “que ha osado hollar el sagrado suelo de la patria”, ha quedado derogado el sistema democrático. Ojalá nos sirva de algo encomendarnos a Dios.
Rafael Marrón González
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