Luego de haber definido el asombro como ignorancia de lo posible, confieso que nada me asombra de este gobierno – cuyo líder pude desentrañar desde su primera y desastrosa aparición pública por lo que fui etiquetado como “exagerado” por la pusilánime ingenuidad política diletante que hoy se “asombra” del medio chuzo de Chávez que tanto señalé, porque lo tienen ya metido en las entrañas. Por eso, de este gobierno – perdón de esta revolución, gobierno trabaja para el bienestar general y revolución para el bienestar del general - todo lo espero, por escabroso o absurdo que parezca como confiscar emisoras y que “para dárselas al pueblo”, como si fuera del pueblo Radio Nacional de Venezuela (Circuito RNV) y sus 102 repetidoras AM y FM al servicio del PSUV, circuito éste que, para los chavistas de la godarria, no carteliza la información como supuestamente sí lo hacen los independientes, tal como asegura un diputado comunista de los pateados por la ley electoral que sostiene que “la revolución no puede admitir que existan emisoras contrarias a la ortodoxia oficial” y, a la vez, que “hay que “democratizar” el espectro radioeléctrico”, es decir, en idiotez extrema “democratizar” significa uso exclusivo de chavistas “uh ah”, o sea fascismo. Así que, sin analizar las consecuencias internacionales – pa´eso tiene petrodólares - en un Aló, Presidente – suerte de tribuna pública para la improvisación totalitaria – ordenó a su Eloy Tarazona particular – capaz de cumplir sin inmutarse la orden más torva - que se encargara de apagar las emisoras independientes del país, pues por culpa de ellas “la revolución no tenía 90% de simpatía”. Y, con la eficiencia que ya quisiéramos para construir viviendas - que es la responsabilidad titular de Tarazona quien gaguea que “con esos medios no es posible el socialismo”– alegando no haber acudido a presentar los recaudos en el plazo perentorio acordado unilateralmente, 240 estaciones de radio fueron seleccionadas para despojarlas de sus señales – pero advirtiendo como matón impune - a las que sí se presentaron que no se hicieran ilusiones porque les estaban buscando la falla para siquitrillarlas - de las cuales las primeras 34 (y 2 televisoras) fueron notificadas a partir de las 7:45 pm del Viernes 31 de Julio – de noche y en fin de semana y sin derecho a la defensa - de que debían apagar sus transmisores, a través de una misiva encabezada: “Nos es grato notificar a usted que…”. ¡Les fue grato quitarle el trabajo a cientos de venezolanos humildes, que lloran su incertidumbre! ¡Les fue muy grato lanzar a la calle a padres y madres de familia que había hecho su vida en el mundo de la radio! Les fue grato dejar sin sus empresas a hombres humildes como fue el caso de la Bonita FM, de Guatire. ¿Por qué La Bonita?, se preguntaba el pueblo al salir del aire, a las 7 de la noche, la pequeña emisora que durante 33 años se había encargado de entretener, educar e informar a la población. A su propietario – hijo del fallecido fundador - no se le permitió despedirse de su audiencia: ¡Apágueme esa vaina!, fue la orden tajante. ¿La causa?, retransmitir el programa radial del gobernador de Miranda. La justificación leguleya: Que la concesión no es transferible. Ahora, súbitamente, luego de once años de cobrarle impuestos y de realizar supervisiones, a pesar de que Tarazona había sido presidente de Conatel, es que cae en cuenta de la falla administrativa, que en todo caso pudo subsanarse como lo contempla la ley, con la adecuación documental, pero así de fascistamente nauseabundo es el poder cuando se torna totalitario. Más o menos parecido fue el caso del Circuito CNB: Lo que lo condenó al ostracismo del espectro radioeléctrico fue transmitir Aló, Ciudadano, programa que concentra todo el odio de Chávez y de sus conmilitones porque refleja el sufrimiento del pueblo – producto de la ineficacia de la burocracia revolucionaria - y denuncia la asquerosa corrupción de los intocables del régimen.
La opinión internacional
“El cierre de un medio de comunicación es un acto de violencia”, expresó el presidente de Paraguay Fernando Lugo al ser consultado sobre el ataque a la liberad de expresión cometido por Chávez amparado en el incumplimiento de un requisito público. Y ese pensamiento recoge la certidumbre del mundo: Con este zarpazo bestial, impolítico, absolutamente desquiciado Chávez perdió los últimos vestigios de opinión favorable que tenía en la prensa internacional, desnudando ante el mundo el carácter despótico de un militarista que había logrado mimetizar su realidad tras su discurso “vean lo que yo hago, no lo que yo digo”. Pues, el planeta acaba de comprobar lo que él es capaz de hacer y la estupefacción dio paso a airadas reacciones adversas: Relator de la ONU: “Es un hecho absolutamente inusitado un cierre tan masivo de radios. Constituye un hecho grave de violación a la libertad de expresión sin precedentes en el continente. Si tenían problemas administrativos, que es el argumento que se ha utilizado, se resuelve en forma administrativa, pero no con el cierre de la radio, este es un mal precedente”. La Comisión Interamericana de los Derechos Humanos: “Es una contradicción contra la libertad de expresión”. Reporteros sin Fronteras: “El cierre masivo que atiende oficialmente a razones administrativas, evidencia la voluntad gubernamental de acallar las voces discordantes y sólo empeorará las divisiones en el seno de la sociedad venezolana”. Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y Asociación de Periodistas Vascos (APV): “Es preciso preservar la libertad de prensa y de opinión para tejer una sociedad plenamente democrática, así como proteger el derecho de la ciudadanía a la información”. La organización AIR (Uruguay) que agrupa 170 mil emisoras en el mundo: “El régimen autoritario venezolano incrementa sus acciones de hostilidad y violencia contra los medios libres e independientes. El llamado a la comunidad internacional, para que se activen los mecanismos previstos en la Carta Democrática Interamericana”. El Comité para la Protección de los Periodistas (Nueva York): “El Gobierno está utilizando la regulación de las frecuencias del espacio radioeléctrico como un pretexto para silenciar a las voces críticas e independientes”. El Instituto Prensa y Sociedad (Perú): “Total rechazo a estas medidas. Estamos alarmados por la dimensión del cierre. Esto no es solo un atentado a la libertad de expresión, sino contra bases del sistema democrático”. El Partido Socialista Francés: “Los ataques a la libertad de expresión son una amenaza al sistema democrático”. El Congreso de Chile (64 a 4): “Se rechaza rotundamente la amenaza, la violencia y el abuso de poder en Venezuela y se condena el insulto y la utilización de la justicia como arma de acción política, con el fin de atemorizar a los medios de comunicación social y así restringir y aun suprimir la libertad de expresión y de prensa”. Human Rights Watch: “La comunidad internacional es tremendamente impotente ante las medidas restrictivas implementadas por el gobierno del presidente Hugo Chávez contra los medios de comunicación”. Pero la opinión más importante es la del pueblo venezolano: Relegando a un oscuro rincón con 12% a los fanáticos chacumbelizados que apoyan todo lo que haga Chávez, 80% de los encuestados (Hinterlaces) rechaza el cierre de las emisoras y considera que Chávez cierra medios para que no se ventilen sus errores.
¿Por qué ahora?
Qué impulsó a este perturbado espíritu contradictorio seducido por un boqueante dictador – apoyado por nulidades corruptas y fanáticos desahuciados – a atentar contra un derecho humano tan sensible para las sociedades modernas, precisamente en este momento. La respuesta es: ¡El miedo! Todas las encuestas en poder de sus cubanos revelan el descenso de su caudal electoral - a partir del 15F - porque ya más del 60% del pueblo lo responsabiliza de las fallas del gobierno, al grado de asegurarle la pérdida de la Asamblea Nacional el 2010 y su segura derrota para el 2012. Pero los intereses creados – que le rellenan sus actos con franelitascolorás portátiles - le han asegurado que cerrando todos los medios radioeléctricos independientes y otorgando las concesiones a los oligarcas “dólare$ dolarito$” – hegemonía mediática - el pueblo volverá a creer ciegamente en los embustes de su discurso. Lo que no le dicen es que a sus medios nadie los ve ni los escucha – Alo, Presidente tiene 4% de audiencia. ¿Uh, ah? ¡Si oh!
Rafael Marrón González
Rafael Marrón González
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